El Compos tratará de ganar por primera vez a domicilio en el último desplazamiento del año
(Domingo, García Calvo, 16:30h)
El Compostela jugará este domingo su último partido como visitante del año. Un año 2016, que probablemente sea el peor de su historia a domicilio. Si no lo remedia mañana, terminará con tan sólo dos victorias en 365 días, las dos pertenecientes ya a la temporada pasada. Es cierto que estos números tan nefastos no tienen ya arreglo por más que se gane mañana, pero también lo es que de nada sirve ya mirar al pasado. La victoria debe llegar no para mejorar una mala estadística, sino para refrendar el buen resultado de este jueves y para tratar de dejar al equipo lo mejor colocado posible de cara al largo parón navideño. Ni siquiera se trata ya tanto de ganar por primera vez fuera de casa, sino de mostrar cierta regularidad y que la SD sea capaz de encadenar varias victorias consecutivas.
El campo seguramente no sea el más propicio para lograr ese primer triunfo lejos de San Lázaro. Hablamos de un Negreira que sólo ha perdido un partido en su feudo, y eso que por allí han pasado equipos de la parte alta de la tabla como el Arosa o el Barbadás. En realidad, es un equipo que pierde muy pocos partidos, un total de tres en lo que va de campeonato. Registros que sólo mejoran el Rápido de Bouzas y el Arosa. También es cierto que empata muchos partidos. En ese sentido, guarda cierto paralelismo con la SD, y de hecho, ambos conjuntos suman el mismo número de puntos. Aunque la gran diferencia se halla en la parcela defensiva, pues los nicrarienses han encajado hasta diez tantos menos, mientras los números en ataque se encuentran más parejos (25 del Compos frente a 21 del Negreira).
Se trata de un equipo ya con cierta solera en la categoría, que desde el año 2001 sólo se ha ausentado de la misma en dos ocasiones: hace dos temporadas, tras haber caído a Preferente, y en la 2005-2006, donde los rojillos consiguieron uno de los mayores hitos del fútbol modesto gallego al alcanzar la división de bronce. Esa segunda mitad de la década 2000-2010 fueron sin duda los mejores años que se vieron en el García Calvo. Una temporada en 2ªB, dos promociones de ascenso, y el equipo solía terminar siempre entre los diez primeros. Después, llegaron tiempos peores, o no tan buenos, en los que los nicrarienses sufrían por no descender, un descenso que se consumó en 2014.
Sin embargo, tras recuperar la categoría perdida, parece que el Negreira puede volver a ser un equipo de mitad alta de tabla. Han formado un bloque de jugadores con mucha experiencia y calidad, además de por cierto, un marcado acento compostelanista, con jugadores como Ángelo, Rendo, Pignol, Jacobo Tato, Stefan, Chiño o Alberto Mariño, si bien el ex capitán blanquiazul está sancionado para este encuentro. Stefan, formado en las categorías inferiores de la SD, y uno de los máximos realizadores de la categoría con siete dianas, y Capelo, que lleva otras cinco, forman una de las parejas de delanteros más interesantes y a tener en cuenta del Grupo I.
Éste será el tercer partido en siete días, por lo que todo hace indicar, como así reconoció Yago Iglesias en rueda de prensa, que habrá rotaciones, aunque el míster blanquiazul dejó entrever que no serán demasiadas pues no sólo se trata de ganar frescura sino de que jueguen aquellos cuyas características los hagan más aptos para este encuentro. Por lo que se refiere al encuentro, el técnico espera un choque de estilos en el que cada uno tratará de llevar el partido a su terreno. Al Negreira le interesará más un partido trabado y que ruede poco el balón, al contrario que un Compos que tratará de mover el esférico y tener el control del juego.
En la SD serán baja una jornada más Samu y Santi. Aunque el delantero ya entrena junto al resto de sus compañeros, todavía no se encuentra en condiciones de jugar.